La tristeza y el dolor son sentimientos con los que tenemos que lidiar, existir, vivir ¿Hay alguna solución? No, realmente; tan solo queda darles expresión y que el cuerpo con el alma aguanten. A continuación, en esa sintonía, te presentamos imágenes de tristeza con frases profundas.
Todo lo que pensé se agoyó, todo lo que pensé no era como creía. Un castillo del existir se cae ante mi persona.
Nunca supe que dolería tanto, aunque ahora sé que me equivoco.
En la vida la regla básica es no esperar mucho de nadie, ni siquiera, a veces, de uno mismo.
Vivir puede ser algo mezquino, ruin, pequeño, obsoleto, sin importancia.
La humanidad es una mera excepción, un punto de encuentro que dio vida solo por breve tiempo.
Mi vida poco conoce de días felices, si de días cualquieras, o de días tristes, pensaba que el mundo iba en mi contra, pero resulta que era yo quien iba en contra de la vida. A veces el problema eres tú y no tu mundo.
La tristeza se apodera de mí, me jura lealtad, me promete ser mi mayor amiga, todo a cambio de su disfrute y diversión. La vida a veces molesta, otras veces duele, y otras muchas te mata. ¿Vale la pena vivir esta vida?
A veces lo que duele no es el dolor, sino que la vida no tiene mucho sentido.
Y todo continúa de algun modo, con balbuceos y titubeos, como aquello que realmente no posee sentido.
No soy una persona estable ni nunca lo seré; la hipocresía no es lo mío.
La sociedad es un grupúsculo de seres llenos de máscaras.
Llegó ese día tan duro, en el que me hice fría, en el que ya nada me dolía, en el que la tristeza me convirtió en quien soy. Y es que había comprendido que nada ya merecía mis lágrimas, que ya estaba bien de llorar por nada.
A veces a lo largo del camino nos hemos de apartar de gente que queremos, y duele, pero lo hacemos porque ellos no nos quieren a nosotros, y eso hace que el dolor se intensifique menos. No llores por quien no lo merece.
Quiero escribir frases o mensajes que puedan explicar al mundo, a mi destino, a todo lo que me rodea, mensajes que expliquen mi tristeza, pero no podría llegar a expresar todo lo que siento, esto tan fuerte que me mata.
Que duro es decidir cuando estás entre esa guerra en la que tu mente te dice que hasta aquí has llegado, y cuando tu corazón te dice que luches y sigas hacia adelante. La tristeza hace de mis días dolorosos calvarios
Dicen que lo que no te mata te fortalece, pero ante la decepción y la tristeza solo siento mi alma languidecer.
La vida es un enorme reservorio de deseos incumplidos, de proyectos sin hacer, de promesas truncas, de anhelos malditos.
Puedo caer en el pozo una, dos, tres, cientos de veces ¿Por qué? ¿En realidad me agrada el dolor?
Seguir adelante. Tan fácil de decir, tan difícil de concretar.
Cuando pienses que no te necesito, por muy raro que te parezca, será cuando más te esté necesitando. Soy raro, soy visible cuando estoy feliz, e invisible cuando estoy mal. Cuando no me encuentres, te estaré necesitando.
El amor que pasa por mí, para acabar con todas mis ilusiones, con todos mis deseos y con todo lo que invertí en él. El amor, eso que tanto viene y va, que tan poco dura la felicidad, y tanto dura el dolor de tener que olvidar.
No podría expresarte la tristeza que acojo en mí, ni con palabras, ni con mensajes, ni con la más dura canción. No existen frases que pudiera escribirte que llegaran a hacerte saber la pena que recorre mi cuerpo, mi tristeza.
Cuando te fuiste sabía que mis horas se convertirían en días, mis días en semanas, mis semanas en meses y meses en años, y ahora que siguen pasando siglos y siglos sin ti, veo que nunca podré dejarte de amar jamás.
La vida no puede ser más que la burla de alguien con un muy mal sentido de humor.
Sonrío por fuera, pero en verdad me desgarro por dentro.
La vida desde hace tiempo ha adquirido para mí tonalidades grises.
Nada me llena ¿Es que soy un vacío andante? ¿Una copa sin fondo?
La sensibilidad, el amor por el otro pasó de moda en un mundo tan individualista y sanguinario como en el que vivimos.
No me quiero alejar de ti, pero tu escaso interés hacia mí forzó tal decisión.
Duele dejar lo que amas, hiere abandonar cualquier sueño hecho en conjunto; todo parece tan estúpido ahora.
El amor no solo duele por el desengaño en la traición, sino por el tiempo perdido que nunca más se recuperará.
Digan lo que digan, en la tristeza no hay felicidad: solo lágrimas y escándalo.
Me quedé con las ganas de que fuéramos la mejor historia de amor.
Con solo desearlo no sirve si tu contraparte decide no serlo más.
El adiós cuando es definitivo y lo sabes no es solo melancólico, sino desgarrador.
El vértigo de querer tirarme por un precipicio y no tener la valentía de hacerlo. Pero ya me di cuenta: el precipio sin fondo es mi propia vida y la amargura de existir.
Vivir, pensar, razonar, a veces, puede doler mucho.
Todo en el universo es efímero, destinado a la putrefacción, maldito y el ser humano no es ninguna excepción.
El dolor no es por el final, sino por anticiparlo a cada instante, sentir su advenir, saber que tal realidad adquirió la forma siniestra del destino.
Es triste mirar lo que te lastima y tener que simular una sonrisa.
Las lagrimas nacen del corazón; no del cerebro.
En la depresión no hay futuro, ni planes, ni anhelos. Es el hombre frente a la inanidad del mundo.
Un alma triste se puede matar a sí y a otros tan rápido como el virus más letal.
Lo tengo todo, pero estoy triste. Quizás no sea algo, tal vez sea alguien.
¿La felicidad es posible? Lo que me ha demostrado la vida es tan solo que es un estado efímero, precario y sumamente voluble.
A veces las sonrisas por fuera, indican batallas por dentro.
Algunas personas por fuera parece que somos de hierro, pero por dentro somos de cristal.
A veces buscas algo y aunque no lo encuentres, sigues buscando y buscando como si fuese a aparecer. Así mismo pasa con el corazón.
No entiendo por qué nos tenemos que sacar el dolor. No es fácil, no es sencillo; no me puedo olvidar de las cicatrices del existir.
El problema con los amores imposibles, es que nos lleva toda la vida olvidarlos.
¡Qué ironía, después de un adiós no lloramos por los malos recuerdos, sino por los buenos!
Ahora que te fuiste tengo que aprender a llevarte en el corazón y no de la mano como antes.
Faltas tú y todo lo demás sobra en mi vida.
Lo difícil no es decir adiós, lo difícil es aprender a no volver.
El amor de mi vida tiene nombre y apellidos, pero la persona equivocada a su lado.
Siembra distancia y cosecharás olvido.
Hay que ser sinceros con uno mismo ¿Nos duele, nos quema, nos hiere? Entonces no tenemos que mentir más.
