Imágenes con frases Cristianas cortas de los mejores pensamientos de Dios
¡Buenos días! Como siempre, te traemos el mejor material que pueda haber. Es importante comenzar el día con el pie derecho y buenas energías. A veces las cosas no salen como queremos: la realidad se empecina en no seguir nuestros designios, tenemos problemas de salud, laborales, económicos o familiares. Sentimos que una voluntad aviesa rige el mundo, o por lo menos el nuestro y no nos deja ser sencillamente felices. En esta situación cada ser humano encontrará su solución, con las herramientas que tenga a la mano. En este caso, este posteo está dedicado a aquellas personas piadosas, que creen en Dios y encuentran en Él cobijo y seguridad. Por eso, te presentamos imágenes con frases cristianas cortas de los mejores pensamientos de Dios. Muchas de ellas te encantarán ¡No te las pierdas!
Tener fe es un acto de salto, un punto en el que dejas de ponderar la situación, sus pro y contra, para dar rienda suelta a la creencia en la voluntad omnímoda de un ser superior. Y no es tarea sencilla, sobre todo si la realidad se empeña en no correspondernos o lo hace pocas veces. Por eso, es un trabajo arduo, fatigoso; pero que es más que importante hacerlo.
Sin embargo, no es malo ser un religioso reflexivo, instruido. Muchas personas lo encontrarían como una contradicción, pero el pensamientos en todos los ámbitos de la vida es necesario. ¿A qué conclusión llegamos con esto? Que todas las imágenes que te presentamos son poderosos estimulantes anímicos y comida sana de la mente, para aplicar en la vida. Nada de parafernalia retórica, sino vocablos que puedas poner en práctica. Nada de letra muerta, sino viviente y llena de esperanza. Encontrar cobijo, reparo y alegría en la palabra de Cristo también puede ser un acto deliberativo y, crease, de los más sustanciales.
Las frases pueden servir para los momentos o etapas lóbregas de la vida: esas en las que necesitamos un aliento especial, cierto espaldarazo porque nuestra existencia soporta una carga que no resistimos. Muchas veces hemos musitado, seguramente, en la soledad o con alguien un: «no puedo más». Y es lógico cuando vislumbramos que los caminos se cierran, que las esperanzas claudican y que no hay salida alguna. Ahí es cuando debe emerger la confianza en Dios, la fe en sus planes elevados y, en última instancia, inescrutables para nosotros, simples mortales. Estas imágenes van a ser un baño para el alma.