40 Calaveritas literarias para maestros

Las calaveritas literarias son una producción tradicional de México, confeccionada en verso y centradas en la figura de La Muerte o Parca. Suelen tener un fuerte componente de humor y sátira. A continuación, como en ningún otro sitio, presentamos 40 calaveritas literarias para maestros para compartir y descargar. 

Calaveritas literarias para maestros de primaria

Calaverita 1
En el aula de la vida, maestro querido,
con tiza en mano, nos ha enseñado el camino.
Hoy en tu día, te recordamos con cariño,
porque en nuestras mentes, ha dejado un legado divino.

Calaverita 2
Maestra de letras, de números y más,
con paciencia infinita, nos hiciste brillar.
Tu sabiduría y amor nunca olvidaremos,
en nuestra memoria, te recordaremos.

Calaverita 3
Don José, el maestro de la escuela,
con su voz amable y su gran paciencia,
nos guio por el mundo del conocimiento,
su legado vive en cada estudiante, con respeto.

Calaverita 4
Maestra Ana, con su sonrisa siempre lista,
nos enseñó a soñar y ser optimistas.
Hoy le rendimos homenaje con alegría,
porque su influencia en nuestras vidas es valiosa todavía.

Calaverita 5
Maestro Juan, de matemáticas y ciencias,
nos desafiaste con tus lecciones precisas.
Aunque al principio parecía un reto,
gracias a ti, hoy enfrentamos el mundo con gran respeto.

Calaverita 6
Maestra Carmen, de la paciencia infinita,
siempre dispuesta a escuchar nuestra voz bonita.
Hoy te recordamos con gratitud sincera,
porque en tu aula, la vida era verdadera.

Calaverita 7
Don Luis, maestro de historia y geografía,
nos mostraste el mundo con gran alegría.
Tus lecciones nos hicieron viajar sin cesar,
a través del tiempo y el espacio, sin parar.

Calaverita 8
Maestra Laura, de risa contagiosa,
en tu aula, la diversión era asombrosa.
Tus enseñanzas quedaron en nuestro corazón,
hoy te recordamos con gratitud y emoción.

Calaverita 9
Maestro Roberto, el deporte y la salud,
nos inspiraste a mantenernos en plenitud.
Tus consejos sobre vida sana y activa,
son tesoros que atesoramos, sin duda.

Calaverita 10
Maestra Rosa, de arte y creatividad,
en tu clase, encontramos nuestra identidad.
Tus pinceles y colores nos hicieron volar alto,
en el mundo del arte, siempre estaremos a tu lado.

Ver También   Cómo escribir calaveritas literarias (con ejemplos)

Calaverita 11
Maestro Pedro, de música y armonía,
tus melodías nos llenaron de alegría.
Hoy cantamos en tu honor con gratitud,
porque tu pasión por la música fue nuestra virtud.

Calaverita 12
Maestra Marta, de valores y ética,
nos enseñaste a ser personas auténticas.
Hoy recordamos tus lecciones con devoción,
porque en tus palabras encontramos la inspiración.

Calaverita 13
Don Francisco, maestro de la naturaleza,
en tu aula, aprendimos con gran destreza.
La importancia de cuidar nuestro entorno.
Hoy te honramos con un sincero reconocimiento.

Calaverita 14
Maestra Patricia, de lengua y comunicación,
nos diste las herramientas de la expresión.
Hoy escribimos estas letras en tu honor,
porque tu legado perdura, con amor.

Calaverita 15
Maestro Carlos, de educación física y deportes,
nos hiciste amar el movimiento y los retos.
Hoy en tu nombre, corremos y jugamos,
porque tu enseñanza en nuestras vidas es un regalo preciado.

Calaverita 16
Maestra Gloria, de cuentos y relatos,
nos llevaste a mundos mágicos, tan gratos.
Tus palabras nos inspiraron a imaginar,
hoy te recordamos con cariño y admiramos.

Calaverita 17
Don Antonio, maestro de ciencias sociales,
nos hiciste comprender la historia con moralejas.
Hoy en tu memoria, valoramos la sabiduría,
que compartiste con nosotros día tras día.

Calaverita 18
Maestra Silvia, de paciencia sin igual,
en tu aula, aprendimos a avanzar sin cesar.
Hoy te agradecemos por tu dedicación,
porque tu enseñanza fue nuestra inspiración.

Calaverita 19
Maestro Javier, de valores y respeto,
nos guiaste por el camino correcto.
Hoy en tu honor, seguimos tu ejemplo,
de ser buenas personas, siempre es nuestro sueño.

Calaverita 20
Maestra Elena, de amor y comprensión,
nos enseñaste el poder de la educación.
Hoy te recordamos con gratitud sincera,
porque en nuestras vidas, eres una lumbrera.

Calaveras literarias para profesores de secundaria

Calaverita 21
La maestra Laura, con su tiza y su regla en la mano,
nos enseñaba matemáticas, ¡qué desengaño!
Pero ahora que ha partido, recordamos su valía,
y aunque odiábamos los números, le damos las gracias cada día.

Ver También   45 Calaveritas literarias para compañeros de trabajo

Calaverita 22
Don Manuel, de historia y anécdotas varias,
nos contaba batallas y hazañas tan pintorescas.
Hoy en su tumba, el pasado reposa en paz,
porque en cada clase, nos dejaba en total solaz.

 

Calaverita 23
La profe Ana, de lengua y gramática experta,
nos corregía los errores, con mirada alerta.
Aunque a veces era estricto, con mucho rigor,
su sabiduría en las letras, siempre será un honor.

Calaverita 24
El profe Mario, de ciencias y experimentos locos,
nos hacíamos mezclar químicos, ¡qué locura de locos!
A pesar de las explosiones y los sustos,
aprendemos mucho de sus gustos y disgustos.

 

Calaverita 25
La maestra Rosa, con su guitarra en la mano,
nos enseñaba música, ¡qué gran arcano!
A pesar de nuestros desafinados intentos,
en su memoria, cantamos con sentimientos.

Calaverita 26
Don Carlos, de educación física y deportes,
nos hacía correr hasta caer, sin soportes.
Pero gracias a sus enseñanzas, somos fuertes,
y en su honor, seguimos siendo deportistas expertos.

 

Calaverita 27
La profe Alicia, de literatura y cuentos,
nos transportaba a mundos mágicos, sin miramientos.
Hoy en su homenaje, escribimos con emoción,
porque su amor por las letras nos dio inspiración.

Calaverita 28
El maestro Pedro, de geografía y mapas,
nos hizo explorar el mundo, sin trampas.
A pesar de las coordenadas y los paralelos,
apreciamos su sabiduría, sin rodeos.

 

Calaverita 29
La profe Carmen, con su paciencia infinita,
nos enseñaba a resolver problemas con cita.
Aunque a veces nos costaba entender,
hoy en su nombre, agradecemos con placer.

Calaverita 30
Don Francisco, de ética y valores morales,
nos guiaba por el camino de los ideales.
Hoy en su memoria, valoramos su enseñanza,
porque en la secundaria, dejó una gran bonanza.

 

Calaverita 31
La maestra Laura, con sus chistes y humor,
hacía que las clases fueran un gran rumor.
Aunque a veces nos distraíamos en exceso,
hoy recordamos sus risas con aprecio y embeleso.

Ver También   42 Calaveritas literarias para amigos

Calaverita 32
El profe Luis, de tecnología y avances,
nos llevaba al futuro con mucho alcance.
A pesar de los errores y las caídas,
hoy en su nombre, construimos nuestras vidas.

 

Calaverita 33
La profe Gabriela, de arte y creatividad,
nos inspiraba con su originalidad.
A pesar de las manchas de pintura en la ropa,
apreciamos su pasión, sin renuncia ni estopa.

Calaverita 34
Don Roberto, de economía y finanzas,
nos enseñaba a manejar nuestras balanzas.
Aunque a veces el dinero nos confundía,
hoy en su honor, la economía entendemos con alegría.

 

 

Calaverita 35
La maestra Martha, de psicología y mente,
nos ayudaba a comprendernos plenamente.
A pesar de los dilemas y las confusiones,
hoy valoramos sus lecciones, sin ilusiones.

Calaverita 36
El profe Jorge, de física y experimentos locos,
nos hacía temblar con sus trucos tan rococos.
A pesar de los choques y las explosiones,
aprendimos que la ciencia tiene muchas emociones.

 

Calaverita 37
La profe Sofía, de inglés y acento británico,
nos enseñaba a hablar con un estilo único.
A pesar de nuestros intentos por imitar,
hoy en su memoria, el inglés queremos dominar.

Calaverita 38
Don Miguel, de educación cívica y política,
nos hacíamos pensar en el bien común, sin crítica.
A pesar de las discusiones y los debates,
apreciaremos sus lecciones, sin malabares ni compañeros.

 

Calaverita 39
La maestra Elena, con su sabiduría y humor,
nos guiaba por la secundaria con gran ardor.
Hoy en su recuerdo, seguimos adelante,
porque su legado en nuestras vidas es relevante.

Calaverita 40

La maestra Elena, con su sabiduría y humor,
nos guiaba por la secundaria con gran ardor.
Hoy en su recuerdo, seguimos adelante,
porque su legado en nuestras vidas es relevante.

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