Chistes buenos cortos
La vida tendría que ser puro hedonismo ¿No nos hastía el dolor? ¿No nos cansa el aburrimiento, la injusticia, la violencia o frustraciones variopintas de la vida? Posiblemente lo mejor que podamos realizar en esta vida sea reír, reír con todas las fuerzas porque riendo, valga la redundancia, la pasamos mejor. Acostumbamos de alguna manera al cuerpo a relajarse, hallar soluciones en problemáticas distintas y a disfrutar, sacarle todo el zumo a cada realidad que nos presenta la vida. Este es el objetivo del posteo, por eso esperamos que lo disfrutes, querido lector.
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Chistes cortos muy graciosos
El chiste apocopado suele tener una llegada rápida, casi como un efecto que se da de golpe, de súbito y nos deja riendo sin cesar. Con esto no queremos decir que los chistes largos no tengan su belleza, con cuentos desarrollados e historias variadas; pero a veces la atención del receptor o su lectura suele perderse. Digamos, por lo tanto, que si estos relatos jocosos son pequeños y buenos pueden conseguir un resultado formidable. A continuación te dejamos chistes cortos muy graciosos.
Chistes buenos para Whatsapp
WhatsApp es la aplicación número uno de mensajería en el mundo. En ésta circula toda clase de información entre amigos y conocidos. En ese sentido, un buen material para compartir pueden ser los chistes. Es que los relatos hilarantes hacen fáciles las jornadas más difíciles, nos quitan el sopor de un trabajo arduo y hacen más sencilla la vuelta anhelada a casa. Asimismo, sirven para estrechar vínculos con diferentes personas, todo dentro de un ambiente jocoso.
Chistes cortos para niños
Los niños también tienen derecho a reírse, a pasarla bien con un relato, además que éstos ayudan en el interés y en maximizar la concentración del pequeño. Naturalmente, dentro de esta categoría los chistes serán tranquilos, suaves, apelando al mundo infantil para conseguir el objetivo de una risa. En definitiva, lo hilarante ya está presente en nosotros para que pueda surgir.
Chistes de pepito
Pepito es una suerte de personaje anónimo, protagonista de diversas situaciones jocosas, sean con amigos, con la familia, escuela, negocios, etc. No es absolutamente vacío su carácter, porque se lo ha graficado muchas veces, pero si podemos decir que es un personaje bastante amplio. Con él los chistes pueden ser tranquilos, para niños, sencillos; pero también fuertes, dedicados a los adultos. A continuación emplazamos una buena cantidad de ellos, con rasgos bien variados.
Chistes de animales
¿El aninal puede causar gracia? En rigor de verdad, para que el hombre cruce ese puente el animal, por la percepción del hombre, debe actuar antropomórficamente. A nadie le causará los sistemas migratorios de determinadas aves, pero si el chiste las hace parecer humanoides, con problemas, soluciones, accionares humanos, las cosas cambian. En definitiva, no podría ser de otro modo: estos relatos son construcciones de personas.
Chistes de borrachos
Suele decirse que los niños y los borrachos son los únicos que dicen la verdad. Decir la verdad en cualquier circunstancia puede ser peligroso, aunque también, en rigor, tener un componente jocoso ejemplar. Asimismo, el beodo se complica con las situaciones más sencillas, termina en cualquier parte y su misma adicción puede ser motivo de risa. Ya vemos por qué puede ser toda una categoría para esta clase de relatos. A continuación te dejamos unos buenos ejemplos al respecto.
Chistes machistas
Es una premisa bastante asumida el anunciar que para superar una realidad injusta las risas suelen ser una buena herramienta. El machismo, en ese sentido, tiene muchas variantes y aristas perniciosas, pero aquí solo lo utilizamos como justificativo de risas y festejo.
Chistes feministas
Si nos reímos de la mujeres, si las esgrimimos como objeto de burca o jocosidad, es igualmente claro que se puede hacer lo mismo con los hombres y hasta un acto de igualdad, de justicia. Los hombres poseen defectos, máculas, situaciones negativas recurrentes con las que se puede apelar a la gracia y las risas.